Como todos ustedes
sabrán… una Utopía nunca se alcanza. Dicen que lo importante es trabajar para
tratar de llegar a ella, porque en el camino a ese ideal se mejora, se
perfecciona, se logran objetivos cada vez más elevados, más sanos… pero el
ideal mismo, la Utopía, parece cada vez más lejos.
¿Habrá
pasado esto con la carrera docente? ¿Se
ha transformado en una Utopía? Hubo un tiempo en que no fue así en la UNL y por
lo tanto en la FICH. ¿Qué ha pasado?
Por GRD
Según los comentarios de pasillo que han circulado en estos
últimos tiempos, la designación de docentes en cargos en los diferentes
Departamentos que integran nuestra Facultad no ha sido muy clara.
Específicamente, los rumores afirman que se han cubierto
cargos docentes (generalmente de profesores adjuntos) con profesionales sin
antigüedad docente, incluso como responsables de cátedras. Ello a pesar que los
planteles docentes que integran varias de esas cátedras hace largos años que
vienen ejerciendo esa tarea y, por lo tanto, acreditan experiencia más que
suficiente (e idoneidad) para ser sus responsables. Experiencia e idoneidad que tienen el derecho
de verificar mediante el concurso respectivo, como corresponde en toda “carrera
docente” que se precie de tal. ¿Será
esto último una Utopía?
Dicen que muchas de las designaciones de marras, han sido
decididas y realizadas por la gestión sin un criterio claro, sin pautas reglamentadas que sustenten
ese accionar. Aparentemente la mayoría de los nuevos nombramientos ni siquiera
han surgido de un consenso y análisis interno en los Departamentos
correspondientes, sino que han sido resueltos por la gestión y, en contadas ocasiones,
con conocimiento del Director. Esto es, a contrapelo de lo que significa una
verdadera “carrera docente”.
Según las fuentes oficiosas los nuevos cargos se han
generado mediante la partición de los cargos de docentes recientemente
jubilados y afectación de puntos sobrantes
de diferentes transformaciones de aquellos.
Sea cual sea el origen, los cargos están y los maldicientes
de siempre afirman que toda esta situación está generando “tensiones” en los
diferentes “académica/os veterana/os” de nuestra facultad que “observan” como
aparecen docentes nuevos en los cargos de responsables de cátedras, a los
cuales ellos anhelaban acceder, obstruyendo las posibilidades de crecimiento.
En conclusión, aparentemente la “carrera docente” se ha
transformado en la FICH en una Utopía “devaluada” (por calificarla de algún
modo) puesto que el camino hacia ella, el tender hacia ella, no produce un mejoramiento
sino que está asociado a estancamiento, desaliento, desilusión y, en última
instancia, bronca, como sucede cuando no se respetan los años de experiencia,
el mérito y las normas más elementales de justicia.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Deje su mensaje, y debajo, su nombre y email.